Tras una lucha legal de más de dos años, aproximadamente 22.000 personas en Arizona que calificaron para el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, siglas en inglés) finalmente podrán solicitar y recibir licencias de conducir.
La semana pasada, el juez federal del distrito de Arizona David Campbell emitió una orden ordenando al Estado de Arizona que debía emitir licencias de conducir a personas inscritas en DACA a partir del lunes, 22 de diciembre del 2014.
La orden fue emitida luego que la Corte Suprema de Estados Unidos rechazara la apelación de emergencia de la Gobernadora de Arizona Jan Brewer que buscaba revertir la decisión de la Corte Federal de Apelaciones del Noveno Circuito.
La corte federal de apelaciones había dictaminado que bloquear la emisión de licencias de conducir a personas con DACA es inconstitucional y ordenó que el estado otorgara licencias de conducir a estas personas.
Desde que el Presidente Obama autorizó el programa de DACA en el 2012, la Gobernadora Brewer dijo que su estado no le daría licencias de conducir a personas con DACA.
Hasta el momento, el costo de la batalla legal de la Gobernadora Brewer para impedir el acceso a licencias de conducir a personas con DACA ha sido de más de $1.5 millones de dólares.
La Gobernadora Brewer no solo ha implementado una política de discriminación hacia personas con DACA, sino que ha mal gastado tiempo y dinero del Estado en una batalla legal innecesaria y que finalmente, no logró su objetivo.