La lucha de los DREAMers - estudiantes inmigrantes indocumentados que están desde muy temprana edad en los Estados Unidos y que buscan un camino a la legalización - obtuvo una victoria hoy.
Con vigencia inmediata, el Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos (DHS) anunció hoy cambios a la política inmigratoria que protegería a los DREAMers de la deportación, estableciendo pautas que delinean la elegibilidad de ciertos jóvenes que no son un riesgo para la seguridad nacional ni para la seguridad pública.
Esta directiva de la administración Obama establece el uso de "ejercicio de la discreción", específicamente la acción diferida, que autoriza aplazar la deportación de un individuo como un acto de discreción del fiscal, sin que la persona siga acumulando tiempo de indocumentado.
El ejercicio de la discreción significa que el DHS evaluará cada caso, y si la persona cumple con varios criterios clave será considerada para recibir acción diferida durante un período de dos años, sujeto a renovación, y una autorización de empleo, si pueden demostrar "una necesidad económica para el empleo".
O sea, que no solamente estarían protegidos de la deportación, sino que también podrián trabajar legalmente en el país.
No todos los jóvenes que entraron a los EE.UU. de forma indocumentada siendo menores de edad serán elegibles.
Bajo esta directiva, los jóvenes deben demostrar que cumplen con los siguientes criterios para ser elegibles:
1) haber llegado a los Estados Unidos siendo menor de 16 años de edad;
2) haber vivido continuamente en los Estados Unidos durante al menos cinco años antes del 15 de junio del 2012 y estar presente actualmente en país;
3) está asistiendo actualmente a la escuela, se ha graduado de la escuela secundaria, ha obtenido un certificado de desarrollo de educación general (GED), o es un veterano que ha sido dado de alta con honores de los Guardacostas o las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos;
4) no ha sido condenado por un delito mayor, un delito menor significativo, múltiples delitos menores ni representa una amenaza para la seguridad nacional o la seguridad pública;
5) no es mayor de 30 años de edad.
Las solicitudes de acción diferida se decidirán individualmente caso por caso. El DHS no ofrece ninguna garantía de que dichas solicitudes sean concedidas.
El programa de acción diferida puede ser rescindido en cualquier momento a la discreción de DHS o ser renovado por la agencia.
Aunque este programa entra en vigor inmediatamente, se estima que el Servicio de Ciudadania e Inmigracion (USCIS) y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) comenzarán la implementación del proceso de solicitud en un plazo de 60 días. En ese entonces, USCIS y ICE anunciaran el proceso que se debe seguir para solicitar acción diferida.
Por lo tanto, no envien ninguna solicitud al gobierno por ahora.
Segun DHS, la ley de inmigración no debería ser utilizada para deportar a jóvenes que por lo general no tomaron la decisión de venir a los EE.UU. y que ahora son miembros productivos de nuestro país. El DHS ha decidido mejor enfocarse en encontrar y deportar a individuos que presentan un peligro para la seguridad nacional o la seguridad pública, incluyendo a inmigrantes condenados por delitos graves y transgresores reincidentes de la ley de inmigración.
La acción diferida no es una residencia permanente ni lleva hacia la ciudadanía. Solo el Congreso puede otorgar estos derechos.
Para las personas que ya están en el proceso de deportación y que cumplen con los requisitos anteriormente descritos, ICE comenzará a ofrecerles inmediatamente la acción diferida durante un período de dos años, sujeto a renovación.
Por favor, consulten con un abogado de inmigración antes de iniciar cualquier trámite.