A solo horas antes de que la ley entrara en efecto, la juez federal Susan Bolton bloqueó las partes más controversiales de la ley S.B. 1070. La ley va a entrar en vigor mañana, jueves 29 de julio, pero sin las provisiones que preocupaban a la comunidad latina y a activistas y defensores de inmigrantes indocumentados.
La juez Bolton dictaminó que agentes de la policía no podrán pedirle a las personas documentación que compruebe su estatus inmigratorio, ni podrán hacer arrestos sin una orden de detención, simplemente por sospechar que una persona sea indocumentada. Además, Arizona no podrá penalizar a inmigrantes por no llevar consigo sus documentos inmigratorios en todo momento, ni podrá criminalizar a personas indocumentadas por solicitar trabajo o trabajar sin autorización.
La juez dictaminó que la ley perjudicaría a extranjeros que están legalmente en el país. Así lo expresó: "Requerir que agentes y agencias de la ley de Arizona determinen el estatus inmigratorio de toda persona arrestada perjudicaría a inmigrantes documentados porque los privaría de su libertad mientras se verifica su estatus."
La juez Bolton dictaminó que las controversiales secciones de la ley serán postergadas hasta que las cortes puedan resolverlas. Otras provisiones de la ley y algunas revisiones a un estatuto inmigratorio de Arizona entrarán en vigor a las 12:01 a.m.
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